lunes, 10 de septiembre de 2012

LEYENDA DE LOS VOLCANES

HOY EN LA CLASE ESCUCHAMOS UNA LEYENDA QUE SE TRATABA SOBRE LOS VOLCANES DE LA CIUDAD DE MÉXICO EN LA VOZ DE MARIO IVÁN MARTÍNEZ







En La Leyenda de los Volcanes conocemos una historia de amor digna de ser contada y a la vez entendemos porqué para los antiguos pobladores de México el Iztaccíhuatl traza la figura de una mujer dormida bajo el sol y el Popocatépetl flamea a través de los siglos con amoroso cuidado. Al mismo tiempo, se incorpora la extraordinaria historia de Tzinácatl, un vanidoso príncipe, quien manejaba el arco con gran maestría y es convertido por Tonatíuh, el Dios del Sol en el murciélago que vaga por las noches.


Se cuentan muchas leyendas sobre los volcanes Popocatépetl e Iztaccíhuatl. Una de ellas dice que en el valle de México había un poderoso emperador con espíritu guerrero. Este emperador tenía una hija, la princesa Iztaccíhuatl.
La princesa se enamoró de Popocatépetl, un joven guerrero valeroso e inteligente. El emperador veía con agrado el mnatrimonio de su hija Iztaccíhuatl con el joven guerrero.

Cuando Iztaccíhuatl y Popocatépetl iban a celebrar su boda, los ejércitos enemigos decidieron atacar. El emperador reunió a sus guerreros y confió a Popocatépetl la misión de dirigirlos en los combates.

Popocatépetl fue a la guerra y tras varios meses de combate logró vencer al enemigo. Antes de que el emperador se enterara de la victoria, unos guerreros envidiosos le mal informaron que Popocatépelt había muerto en combate. Iztaccíhuatl escuchó esta noticia falsa y lloró amargamente. Dejó de comer y cayó en un sueño profundo, sin que nadie pudiera despertarla.

Cuando Popocatépetl regresó victorioso supo lo que había sucedido y buscó a Iztaccíhuatl, la cargó en sus brazos, tomó una antorcha encendida y salió del palacio y de la ciudad. Nadie volvió a verlos.

Después de varios días, todas las personas del valle de México se asombraron al ver dos montañas muy altas que habían surgido de la tierra y lanzaban llamas hacia el cielo. Se trataba de dos volcanes.

Cuando el emperador vio las montañas, dijo a su pueblo:

Iztaccíhuatl y Popocatépetl murieron de tristeza poque no podían vivir el uno sin el otro. El amor los ha transformado en volcanes y su corazón fiel arderá como una flama para siempre














BUENO ESTE FUE MI REPORTE DE LA CLASE DE HOY ESPERO Y LES GUSTE 




6 comentarios:

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